Martes, 02 Agosto 2016 20:35

Café de la Flor, la muerte negligente

Escrito por  Luciana Mangó
    Café de la Flor, la muerte negligente

    El propietario del Café de la Flor y el electricista que trabajó en el lugar fueron acusados con 4 y 5 años de prisión efectiva más inhabilitación, por el delito de homicidio culposo tras la muerte del bajista de Raras Bestias. El tercer imputado es un agente municipal, cuya acusación se conocerá esta semana.

    La muerte del bajista de la banda local Raras Bestias, el pasado 12 de octubre, tras recibir una descarga eléctrica sobre el escenario del bar Café de la Flor ya lleva tres imputados. El propietario del bar, Ariel S., y el electricista que trabajó en la instalación del lugar, Fernando C., fueron imputados por el delito de homicidio culposo en calidad de coautores, para quienes el Ministerio Público de la Acusación, a cargo de la fiscal Valeria Piazza Iglesias solicitó la pena de 4 y 5 años de prisión de ejecución efectiva, respectivamente, más 10 años de inhabilitación para ejercer actividades.

     

    El tercer imputado es el último inspector municipal en revisar el lugar, seis meses antes de la tragedia, Pablo A., por incumplimiento de los deberes de funcionario público. La acusación se presentará en el transcurso de esta semana y la pena para el delito va entre un mes y dos años de prisión e inhabilitación. La causa irá por un carril distinto a las demás al tratarse de delitos diferentes.

    Por su parte, la familia del músico participa como querellante de la causa, cuya fecha de audiencia preliminar se conocerá una vez presentadas todas las acusaciones.

    El caso

    El pasado 12 de octubre, el bajista de la banda de rock Raras Bestias, Adrián Rodríguez,  murió sobre el escenario del Café de la Flor, tras recibir una descarga eléctrica del micrófono, cuando promediaba el show. Según indicaron los testigos, la corriente alcanzó primero al guitarrista. Rodríguez quiso asistirlo y recibió el letal impacto.
    Una de las primeras hipótesis que se manejaron era que el electricista habría desactivado el disyuntor para evitar fallas en la corriente, las que se venían registrando en el lugar los días previos. Mediante este procedimiento, comúnmente conocido como “puentear”, el disyuntor no corta la energía aún si se detecta algún inconveniente, con el objetivo de garantizar que el show pueda continuar.

    La muerte de Rodríguez generó gran preocupación en la comunidad de los músicos locales. Un grupo de autoconvocados marcharon para reclamar por mejores condiciones a la hora de tocar luego del suceso. Las respuestas siguen pendientes.

    Los imputados

    El primer imputado fue Ariel S., a fines de octubre del año pasado, por homicidio culposo. La fiscal Piazza Iglesias atribuyó al comerciante “haber causado, por negligencia e inobservación de los reglamentos y deberes a su cargo, la muerte por electrocución de Adrián Rodríguez, producto de desperfectos en el sistema eléctrico”, y lo acusó de “violación del deber de cuidado exigido a un comerciante que brinda un servicio de espectáculos en vivo”. Este delito se encuadra como “homicidio culposo”, por el que la fiscal solicitó la semana pasada una pena de 4 años de prisión efectiva más otros 10 de inhabilitación en el ejercicio de actividades comerciales.

    Por el mismo delito, en abril de este año, el Ministerio Público de la Acusación imputó a Fernando C., electricista que habría desconectado el disyuntor diferencial el fin de semana de la tragedia. Para el técnico, la fiscal solicitó la pena de 5 años de prisión efectiva y 10 años de inhabilitación para ejercer su oficio por considerar que el hombre de 34 años violó el deber de cuidar a los músicos al desconectar el interruptor diferencial del tablero principal.

    El último de los imputados es un inspector de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana, Pablo A., quien revisó las condiciones del lugar en abril del año pasado, seis meses antes de ocurrir el siniestro. Al agente se lo imputó por incumplimiento de los deberes de funcionario público y desde Fiscalía adelantaron que las acusaciones se conocerán en el transcurso de esta semana e irán a juicios separados.

    El informe con las pericias técnicas realizadas en el lugar concluyó en abril de este año, del que se desprendió que los inconvenientes en el establecimiento provenían desde hacía tiempo atrás. Una vez presentadas todas las acusaciones se conocerá la fecha para la audiencia preliminar en los Tribunales Provinciales.

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